El equipo de Kyocera Document Solutions Chile vivió una experiencia inolvidable al visitar las ciudades de Osaka y Kyoto en Japón. El propósito del viaje fue profundizar el vínculo con la historia y los valores de la compañía, además de conmemorar los importantes hitos alcanzados durante el último año fiscal.
A lo largo de cinco días, los participantes exploraron lugares emblemáticos, disfrutaron de la gastronomía local, compartieron espacios con compañeros Japón y reconectaron con los valores que inspiran el trabajo de la compañía a nivel global. Fue un viaje que fortaleció tanto el espíritu de equipo como el compromiso con la visión de Kyocera.
El itinerario comenzó con la llegada a la ciudad portuaria de Osaka, donde los asistentes fueron recibidos con una cena y un momento de descanso en el hotel Voco Osaka Central. La primera jornada sirvió como adaptación después del largo trayecto y como punto de partida para los días posteriores.
La segunda jornada ofreció un equilibrio perfecto entre el futuro y la tradición. El grupo empezó el día con una visita a la Expo en Osaka, donde pudieron conocer avances tecnológicos y proyectos que anticipan el evento internacional de 2025. Más tarde, exploraron el Castillo de Osaka y el observatorio del Umeda Sky Building, disfrutando de una vista inigualable de la ciudad. El día cerró con una deliciosa cena tradicional.
El grupo visitó las oficinas de Kyocera Document Solutions (KDC), donde fueron recibidos por el equipo local y conocieron de primera mano las innovaciones que la compañía está impulsando a nivel global. Más tarde, disfrutaron de un almuerzo en el restaurante SEN y se trasladaron a Kyoto. Esa noche visitaron Warin-an, un entorno íntimo y acogedor que les permitió conocer otra propuesta de comida local.
El cuarto día estuvo dedicado a la conexión: institucional y espiritual. Por la mañana, el grupo recorrió la sede de Kyocera Corporation: una experiencia enriquecedora que permitió conocer más en profundidad la historia y los valores fundacionales de la empresa. Tras el almuerzo en el restaurante La Jyho, la jornada continuó con la visita a dos templos emblemáticos de Kyoto: el Kinkakuji (Pabellón Dorado) y el Kiyomizu, ambos Patrimonio de la Humanidad y reflejo del legado espiritual de la ciudad.
El último día, los asistentes emprendieron su regreso a Santiago de Chile. La experiencia les permitió llevar consigo una visión más amplia del trabajo que Kyocera hace a nivel internacional y una conexión más profunda con la esencia de la compañía.
Este tipo de experiencias reafirman el compromiso de Kyocera con la excelencia, la innovación y el respeto por las personas. Volver al país de origen de la compañía permitió renovar energías y proyectar el futuro con más fuerza que nunca. Los resultados alcanzados en el último año fiscal son sólo el comienzo de una etapa aún más prometedora.
Agradecemos, como siempre, a todo el equipo de Kyocera Document Solutions Chile por su confianza. Kyocera sigue avanzando gracias a sus éxitos, con la mirada puesta en seguir construyendo soluciones que transformen positivamente al mundo.